ACARICIANTE

miércoles, 26 de enero de 2011



Extendí mis manos como mariposa desplegada y agité mis alas de cristal y sueños, entre las sábanas de mirra y los pétalos de fuego y ante sus párpados danzantes que me acariciaron toda, sin poder emitir palabra ante el silencio de su boca abierta y lo cubrí de besos como un amanecer desnudo y me recosté en su pecho…

Y palpitante mi esencia desbordó mi cuerpo y me vi pegada a su silueta como un tatuaje de gardenias en las primaveras indiscretas que brotaron de los sauces altos y mojaron sus pies descalzos en riachuelos de caricias, como sus manos húmedas de sueños y sus labios…ay esos labios suyos donde cabe mi aposento…

Allí en el regazo palpitante de un amor que tiembla como una estrella blanca en la espesura de la noche intensa, que sujeta los dinteles de la luna entre sus muslos agitados, cabalgó por mis montañas que lo llevaron a la cima de mis senos y ha bebido muy despacio mis silencios, en aureolas de gemidos y se ha posado sigiloso en un suspiro donde amor nuestros caminos se estrecharon en los cielos…

Y lo miré callada, como miran los silencios a la noche…en esas lunas llenas tan blancas y redondas donde el mundo parece girar ante sus ojos y todos los matices platinados que adornan sus cabellos, se agitan en mis manos, cuando llego vida mía a apretarlo sobre el pecho y lo amo como el tiempo se ama con los vientos!

Y en ese momento justo en que la lluvia cesa y el rocío brota de las margaritas blancas,
la noche se cuela por la ventana y se esconde en sus brazos,
mientras mi alma, se funde con sus ojos negros!

Eileen

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